Se trata de una moda que se ha extendido desde Suecia a otros países y que consiste en recoger basura mientras se hace deporte, una práctica que nació con la fiebre del running pero que se aplica ya en disciplinas como el senderismo, el ciclismo, el buceo o el paddle surf, y que está consiguiendo librar de residuos tanto el mar, la playa, la montaña e incluso el entorno urbano.
No es extraño que cuando salimos a hacer deporte al aire libre, encontremos por el camino envases, basura y todo tipo de residuos abandonados en plena naturaleza, con todo lo que ello supone para el medio ambiente. Fruto de esta desagradable situación, en Suecia surgió hace unos años una iniciativa que combina precisamente el compromiso con el planeta y el interés por el deporte, y lo hace bajo la denominación plogging, que surge del término sueco plocka upp, traducido como recoger, y del inglés jogging, esto es, correr o trotar.
Este movimiento fitness por el medio ambiente se atribuye al sueco Erik Ahlström, que tras dejar Åre, su pueblo, para mudarse a Estocolmo empezó a poner en práctica el ejercicio de salir a correr y recoger basura en los lugares que frecuentaba.
Ese pequeño gesto comenzó a captar seguidores en Suecia hasta convertirse en un fenómeno global a partir de 2018, cuando se popularizó en otros países, impulsado principalmente a través de las redes sociales. En España hay también cada vez más adeptos a esta práctica.
Los defensores del plogging aseguran que la combinación de ambos objetivos supone una sesión intensa de trabajo físico, ya que se hacen trayectos largos intercalados con las sentadillas que requiere el agacharse para recoger un residuo y volver a levantarse para retomar la marcha. Este trabajo básico de glúteos y piernas se puede hacer aún más intenso añadiendo otros movimientos como, por ejemplo, los saltos o flexiones.
«Teniendo en cuenta que en España unos 4 millones de personas practican senderismo de forma regular y un 33% de la población sale a correr más de 3 días por semana, aprovechar esas salidas para practicar el plogging durante el recorrido podría significar un cambio radical en el estado de nuestro entorno en muy poco tiempo», defienden en Plogging Revolution, una web en la que se promueve este estilo de vida e incluso organiza eventos para practicarlo en grupo.
Entre los múltiples consejos que giran en torno a la práctica del plogging se incluye aprovechar los desplazamientos diarios para iniciarse en la recogida de residuos, organizar carreras cortas pero intensas y, por supuesto, usar siempre guantes para proteger las manos.